DIA MIERCOLES

Miércoles
Leer con oración:
Ro 3:24; 5:9; Ef 1:6-8; 1 P 1:18-19; 1 Jn 1:7, 9

“El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.”(Col 1:13-14)
La Obra Del Hijo
Efesios 1 nos muestra que fuimos escogidos y predestinados para la filiación, según el buen placer de la voluntad de Dios (vs. 4-5). El versículo 6 prosigue: “Para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado”. La gracia es Dios mismo en Cristo, concedido a nosotros gratuitamente. Nuestro Dios es rico para con todos los que Lo invocan (Ro 10:12). Por eso Pablo menciona las “riquezas de su gracia” (Ef 1:7). Un día el Señor alcanzó a cada uno de nosotros, sin que tuviéramos que esforzarnos muchísimo o pagar algún precio. Por medio de esa gracia, que es Cristo mismo, nuestra condición cambió y hoy somos hijos de Dios que estamos en el proceso de crecimiento de vida.
La bendición del Hijo, Su obra por nosotros, es descrita a partir del versículo 7: “En quien [en el Amado] tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia”. La redención significa que Dios nos rescató, es decir, nos compró por un alto precio, por la preciosa sangre de Cristo que fue derramada en la cruz (1 P 1:18-19). Por otra parte, la remisión es el perdón de los pecados según la justicia de Dios (1 Jn 1:7). Antes éramos pecadores y estábamos lejos de Dios, pues Él es Santo y no se puede mezclar con el pecado. Sin embargo, cuando creímos en el nombre del Señor y en Su obra redentora, la sangre de Cristo nos limpió y nos lavó de todos los pecados. Por Su sangre fuimos justificados (Ro 3:24; 5:9). Toda esa obra llegó a nosotros a través de las riquezas de la gracia que Dios derramó abundantemente sobre nosotros (Ef 1:8a).
No sólo nuestros pecados fueron perdonados una vez, sino que esa sangre tiene eficacia eterna, de modo que, si pecamos, podemos arrepentirnos y confesar al Señor, y así Dios, por causa de la obra de Su Hijo en favor nuestro, es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad (1 Jn 1:9).
Punto Clave:
Perdonados conforme a la justicia de Dios.
Pregunta:
¿Qué incluye la redención de Cristo?
La iglesia en Armenia
¡Jesus es el Señor!